Alrededor de 200 personas han participado en la carrera de Sant Silvestre, una de las últimas actividades deportivas del año. La prueba organizada por el Club de Muntanya Vilafamés constó de dos categorías, una infantil, en la que los niños y niñas hasta 12 años han recorrido 200 metros, y la de adultos, donde los participantes han tenido que recorrer 3.000 metros.

La prueba, que no tiene carácter competitivo, ha resultado muy colorida, puesto que la gran mayoría de los atletas participantes ha realizado el trayecto disfrazado. Una de las indumentarias que ha llamado más la atención, ha sido la del grupo de atletas que iban vestidos de Ferrero Rocher, recordando la candidatura de Vilafamés a ser el pueblo más bonito y bueno, en el concurso organizado por la marca de bombones. Entre los participantes, hay que resaltar la presencia de Sebastián Mora, el Campeón de Europa de ciclismo en pista.

La organización ha premiado a los tres primeros clasificados tanto en categoría masculina como femenina, además de obsequiar la originalidad de los tres mejores disfraces. Al finalizar el acto, tuvo lugar una chocolatada patrocinada por la Asociación de Jubilados. Desde el Ayuntamiento, el concejal de Fiestas, Sergi Trilles, quiere “agradecer la colaboración tanto del colectivo de jubilados como del Club de Montaña, en la organización de la carrera”.